• Regresó de su exilio de 35 años en México para tratarse en el hospital de Cruces de un tumor maligno •
El refugiado en México reclamado por la justicia española Gaizka Sopelana Adúriz, de 55 años, ha fallecido en el hospital de Cruces en donde se encontraba ingresado desde el 12 de agosto pasado, tras su regreso de América después de 35 años, para tratarse de un tumor maligno, según ha confirmado la organización de apoyo a presos Sare. Sopelana Adúriz fue uno de los reclusos canjeado por la liberación del político Javier Rupérez, secuestrado por ETA político-militar en noviembre de 1979 y contra él hubo, hasta la prescripción del delito, una orden de busca y captura por "recoger cócteles molotov en la sede de Herri Batasuna en Barakaldo" y por "pertenecer a un comando armado". Sare ha señalado, ante esta muerte, que es "absolutamente denunciable" la "dificultad para obtener la asistencia sanitaria necesaria" la "condición de exiliado" de Sopelana Adúriz. "El de las personas exiliadas vascas, es un ámbito de gran inseguridad", señala la organización, que indica además que ""el exilio y la condición de exiliado suelen tener consecuencias perjudiciales en los derechos que les corresponden".
Archivo |
> 12/08/2016. Regresa tras 35 años uno de los presos canjeados por la liberación por ETA (p-m) de Javier Rupérez
El refugiado en México reclamado por la justicia española Gaizka Sopelana Adúriz, de 55 años, ha fallecido en el hospital de Cruces en donde se encontraba ingresado desde el 12 de agosto pasado, tras su regreso de América después de 35 años, para tratarse de un tumor maligno, según ha confirmado la organización de apoyo a presos Sare. Sopelana Adúriz fue uno de los reclusos canjeado por la liberación del político Javier Rupérez, secuestrado por ETA político-militar en noviembre de 1979 y contra él hubo, hasta la prescripción del delito, una orden de busca y captura por "recoger cócteles molotov en la sede de Herri Batasuna en Barakaldo" y por "pertenecer a un comando armado". Sare ha señalado, ante esta muerte, que es "absolutamente denunciable" la "dificultad para obtener la asistencia sanitaria necesaria" la "condición de exiliado" de Sopelana Adúriz. "El de las personas exiliadas vascas, es un ámbito de gran inseguridad", señala la organización, que indica además que ""el exilio y la condición de exiliado suelen tener consecuencias perjudiciales en los derechos que les corresponden".
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